Los muebles son parte de tu carta de presentación, la imagen que transmites y pueden también decir mucho de tu personalidad. Los muebles le dan a tu hogar un estilo único, y siempre buscamos aquellos que se adapten mejor a nuestros gustos.
-
1. Usa productos libres de amoniaco
Antes de utilizar productos de limpieza en tus muebles, lee bien la etiqueta y asegúrate de que no contengan amoniaco. Aunque se utiliza y se recomienda para la limpieza, a la larga el amoniaco puede deteriorar el mueble, quitándole gradualmente el brillo y el color. Mejor opta por productos naturales que no afecten a tus muebles.
-
2. Limpia tus muebles todos los días
Aunque puede que no dispongas de tiempo para hacerlo a diario, dejar que el polvo se acumule sin cuidado puede ser perjudicial. No necesitas un kit completo de limpieza; basta con pasar un paño seco sobre ellos para quitar el polvo acumulado.
-
3. Lustra tus muebles con cera en pasta
Una de las mejores maneras de proteger tus muebles es aplicar cera en pasta de calidad al menos una vez por semana, tras quitar el polvo con un paño. Si realizas este paso de forma constante, con el tiempo tus muebles conservarán su aspecto original.
-
4. Protege los muebles de la luz y el aire
Si tus muebles están en contacto directo con la luz solar o expuestos a corrientes de aire acondicionado, su superficie puede verse afectada. Los cambios bruscos de temperatura pueden provocar abombamientos, deformaciones o grietas. Protege tus muebles con cortinas en las ventanas y manténlos alejados de las corrientes de aire.
-
5. Limpia las manchas cuanto antes
Es fundamental pulir los muebles siempre que sea posible para conservar su color y brillo original. Utiliza un cepillo de cerdas suaves o un paño para eliminar los derrames que puedan ocurrir. Si se produce una mancha, límpiala inmediatamente con un paño seco, evitando que la sustancia se seque y quede impregnada en la superficie.
-
6. No apoyes recipientes calientes
Para evitar dejar marcas en tus muebles, no coloques recipientes o bebidas calientes directamente sobre ellos. Utiliza paños o accesorios adecuados para apoyar estos elementos.
-
7. Cubre la base del mueble al moverlo
Si en algún momento necesitas mover un mueble, coloca restos de alfombras en la superficie que estará en contacto con el piso o en los extremos. De esta forma, proteges el mueble y evitas rayones o daños durante su traslado.
Ahora que conoces estos consejos, aplícalos para que tus muebles luzcan como nuevos y protégelos para que te duren el mayor tiempo posible. Y si vas a estrenar con nosotros, cuídalos aún más.
