Una alternativa muy divertida para los niños y original para la casa es este taburete, aunque también las personas algo más bajas de altura (e imagino que de peso) pueden sentarse en él.
Es un taburete, pero en realidad es como tener un reloj de arena gigante en la casa. A los niños les gustan los relojes de arena, y a los adultos también, queda muy bien donde se lo ponga y sorprenderá a quien lo vea.
Su precio es de 69 dólares y es un elemento decorativo interesante para la casa. Es de madera resistente, y una vez que se enciende tardar 5 minutos en desaparecer.
Para pensar, para reflexionar, para decorar, para los niños, para la casa, este taburete o silla o banco reloj de arena. Es incluso un buen sitio de castigo para los niños, siempre que el castigo sea de 5 minutos, que es lo que tarda la arena en bajar. Por supuesto, no es un juguete, así que hay que cuidar bien lo que hacen los niños y supervisarlos.
